Facebook es un excelente lugar para hacer amigos y compartir tus actividades con ellos, pero si eres un criminal prófugo de la justicia puede traerte complicaciones. A los menos así le pasó a Maxi Sopo.
Sopo, de nacionalidad camerunense, era buscado por la justicia de Estados Unidos por el delito de reiterados robos fraudulentos, y hasta ahora había podido evadir a la policía escapando del país.
Pero el descuidado criminal no pensó en el poder de la web 2.0 y a través de su perfil en Facebook publicaba fotos y comentarios acerca de la buena vida que estaba llevando en Cancún, México, e incluso acepto la amistad de un policía encubierto.
Sus indiscreciones fueron claves para su arresto por parte de la justicia mexicana y ahora espera su deportación al país del norte donde gozará de una buena estadía en prisión, aunque ahora no podrá narrarla a sus amigos virtuales.
Vía: BBC