Facebook, MySpace, Sonico, Fotolog, Orkut, etc., No importa cual o cuales Redes Sociales utilices, ya que en cada una de ellas tu perfil te representa e incluso llega más allá de lo virtual, llevando los resultados de tu comportamiento al mundo real.
Para evitar problemas, existen ciertas reglas de etiqueta que harán de tu vida en la web 2.0 algo más agradable y sin consecuencias para tu existencia desconectada.
Ten cuidado con quienes agregues como amigos: A diferencia de un contacto en Messenger o alguien con quien te comunicas por e-mail, las personas que tienen acceso a tu perfil en alguna Red Social no sólo obtendrán la información que tu quieras compartir vía texto, sino que tendrán acceso a datos personales, fotos, comentarios, etc., lo que a la larga puede perjudicarte.
Piénsalo antes de aceptar o rechazar una petición de amistad: No te guíes por querer tener más amigos o el miedo de ofender al resto. Si estás con dudas sobre alguna petición, piénsalo por un día. ¿Realmente quieres que esa persona, y por consecuencias las que ella conoce, tengan acceso a tu información?
No muestres lo que no quieres que los demás sepan: Si subes las fotos de una fiesta en las que te emborrachaste o comentarios con insultos hacia tu jefe o profesores, seguro será divertido para algunos amigos, pero es probable que dichas informaciones lleguen a personas que podrían ofenderse o enojarse, acarreando consecuencias en tu vida familiar o laboral.
Jamás hagas a los otros lo que no te gustaría que te hagan a ti: Puede ser divertido reírse de las fotos de ese amigo que hizo el ridículo la noche anterior, pero a él puede parecerle desagradable, sobretodo porque sus propios contactos las verán. ¿Acaso te gustaría que tu novia vea una foto en la que apareces abrazado a otra chica? Bueno, a tu amigo tampoco, y si la subes etiquetándolo todos la verán, incluso ella.
Ten cuidado con tus opiniones: Seguro es interesante hablar de política con otras personas, pero si utilizas términos despectivos para referirte a las posiciones de los demás, o la manera en que dices las cosas. No querrás que te conozcan como alguien que discrimina, es racista o xenófobo aunque lo digas en forma de broma. Puedes herir sentimientos y de paso afectar tu reputación entre quienes no te conocen íntimamente y luego ver lo que escribes tampoco querrán hacerlo.
Lo mismo para los grupos: Quizá el nombre puede verse divertido, pero si perteneces a alguno que llame al odio o rechazo contra profesores, gente de otras religiones o incluso tribus urbanas, tendrás que dar muchas explicaciones en la escuela, familia o ante amigos que pueden pertenecer a alguno de los sectores que “dices” despreciar
Cuidado con la foto de perfil: Puedes haber definido que el contenido de tu cuenta sea sólo visible para tus amigos, pero aquella foto perteneciente a tu perfil aparecerá cada vez que alguien te busca. En otras palabras, estará completamente expuesta.
Finalmente, eres lo que presentas: Muchos empleadores, personas a las que invitaste a salir o hasta los padres de tu novia, pueden querer más información de ti y a través de una búsqueda en Google acceder a tu perfil. Seguro que no estarán contentos si te ven poco serio o demasiado polémico. La manera en que te presentes puede valerte un trabajo, una posible relación o la desaprobación por parte de suegros que aún no te conocen personalmente.
esta bueno…